Beneficios nutricionales | Es un componente de todas las células del cuerpo y es necesaria para el crecimiento y desarrollo adecuados. Ayuda a construir y reparar células y tejido corporal. Es una parte importante de su piel, cabello, uñas, músculos, huesos y órganos internos. Se encuentra en casi todos los fluidos corporales. Es importante para muchos procesos corporales, como la coagulación de la sangre, el equilibrio de líquidos, la respuesta inmunitaria, la visión y la producción de hormonas, anticuerpos y enzimas. Aumenta la capacidad de retener agua, reduciendo el tiempo de tránsito intestinal. Reduce el colesterol sérico. Es un carbohidrato complejo por lo que es de absorción lenta y no genera picos de glucosa. Un buen aporte previene enfermedades autoinmunes, algunas enferemdades autoinflamatorias, síndrome metabólico e hipertensión. Es el mineral más abundante en el cuerpo (en huesos y dientes). Muy importante para el buen crecimiento y desarrollo de los niños. Se aumentan sus necesidades durante la infancia, gestación y lactancia. Importante en adultos mayores para evitar osteoporosis. Es necesario un aporte adecuado de calcio en la dieta para permitir aumentos o´ptimos de la masa y la densidad o´seas en los an os prepuberales y en la adolescencia. Son más críticos estos aumentos ya que el hueso acumulado da protección adicional para osteoporosis en la menopausia. Es necesario para la transmisión nerviosa y la regula- ción de la función del músculo cardíaco |